Los especialistas consideran primordial alejarse de los dulces y los refrescos, pues su alto contenido de azúcar dañan la enzima involucrada en la respuesta inflamatoria en las primeras etapas de la enfermedad de Alzheimer, comentó la fuente, al hacer referencia a un estudio realizado en la Universidad Británica de Bath.
El Alzheimer es un tipo de demencia que causa problemas con la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Los síntomas generalmente se desarrollan lentamente y empeoran con el tiempo, hasta que son tan graves que interfieren con las tareas cotidianas.
La enfermedad de Alzheimer es responsable de entre un 60 y un 80 por ciento de los casos de demencia.
Quedó demostrado que los pacientes con diabetes tienen un mayor riesgo de desarrollar Alzheimer en comparación con las personas sanas.
Otro estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition confirmó que el consumo de carnes procesadas resulta un riesgo potencial para la demencia.
Por otra parte, científicos de la Universidad de Australia del Sur detectaron en un estudio que las especias o comidas picantes también pueden ser peligrosas.
Estas guardan relación con la demencia, al contribuir con el deterioro cognitivo acelerado en las personas que se excedían en la cantidad de dichos productos en su dieta.
Las papas fritas, hamburguesas, entre otras comidas chatarras ‘pueden provocar diabetes tipo 2, disminución significativa de la función cerebral y hasta encogimiento cerebral’, alertó la fuente.
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