En el amanecer del domingo fueron atacados varios cuarteles militares y prisiones de Sierra Leona, lo que tomó por sorpresa a la población y fuerzas de seguridad ante la posibilidad de un golpe de Estado.
El mandatario señaló que la mayoría de los atacantes fueron capturados y están en prisión, y el toque de queda se redujo solo a las horas de la noche.
Las autoridades informaron también que se iniciaron las investigaciones y que los responsables tendrán que responder por sus acciones ante la justicia.
Bio resultó reelegido el 24 de junio pasado para un segundo mandato de cinco años, en una votación complicada por la mínima diferencia con el principal partido opositor que consideró amañados los resultados y denunció una supuesta conspiración con la comisión electoral.
Las elecciones ganadas con el 56,17 por ciento de los votos por el actual presidente fueron las quintas celebradas aquí, después del fin de 11 años de una violenta guerra civil, con saldo de unos 50 mil muertos.
El pasado 31 de julio, la Policía arrestó a varios militares, acusados de planear el uso de protestas pacíficas para atentar contra instituciones del estado de esta nación de África occidental, donde el 60 por ciento de la población aún vive por debajo del nivel de pobreza.
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