En un mensaje transmitido anoche por cadena nacional de televisión, el presidente Gabriel Boric anunció un aumento de 5,7 por ciento para garantizar la tranquilidad en los barrios, combatir el narcotráfico y recuperar los espacios públicos.
Según una encuesta reciente publicada aquí, la percepción de inseguridad llegó a su nivel más alto en Chile, donde el 90,6 por ciento de la ciudadanía percibe un aumento de la delincuencia.
En su discurso, el mandatario prometió la compra de más de mil nuevos vehículos policiales, el reforzamiento del plan Calles sin Violencia y del programa contra el crimen organizado.
Boric dijo que el Gobierno trabaja también para superar la compleja situación económica heredada de la pandemia de la Covid-19.
La inflación bajó del 14,1 por ciento en 2022, al cinco por ciento este año y para el próximo se estima ronde el tres, afirmó.
No obstante, admitió que hay muchas familias a las que le cuesta llegar a fin de mes y más aún si sufren cualquier emergencia inesperada.
El presupuesto para 2024 contempla un aumento del gasto público en 3,5 por ciento.
Boric prometió la creación de más de 100 mil nuevos empleos formales el próximo año, seguir avanzando en el aumento del salario mínimo y extender el llamado bolsillo familiar electrónico que ha ayudado a cerca de tres millones de personas.
La tasa de desempleo en el país llegó al 8,9 por ciento en el trimestre móvil de agosto a octubre, con lo cual suman 12 meses consecutivos del aumento de la desocupación.
El plan de gastos e ingresos del Estado prevé también un alza de 8,1 por ciento en el área de la salud para reducir las listas de espera de hasta más de un año, en que las personas deben aguardar para ser atendidas por un especialista o realizarse una cirugía.
En materia de educación crearán 36 nuevos jardines infantiles, aumentarán las Becas de Alimentación para la Educación Superior y ampliarán la gratuidad en las universidades.
Según el presidente, pondrán más atención a los desafíos en los Servicios Locales de Educación, esto luego de la huelga de 82 días en la región de Atacama que evidenció las malas condiciones de los centros de enseñanza.
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