Dos tercios de la población padece inseguridad alimentaria cuando se acerca el año fijado para las elecciones, dijo el enviado ante el Consejo de Seguridad, reunido para tratar el contexto en esa nación y en la vecina Sudán.
El compromiso de la Misión sigue firme para garantizar una transición pacífica e inclusiva dentro del país, aseguró, pero cuando apenas restan 11 meses el ritmo de implementación ha sido desigual.
En tanto, la representante permanente adjunta de Sudán del Sur en la ONU, Cecilia Adeng, aseveró que la nación busca un debate colaborativo y un apoyo constructivo de la comunidad internacional mientras navega por el complejo proceso político, de seguridad, climáticos y humanitarios.
«La terrible situación económica del país y la competencia resultante por recursos cada vez menores a nivel subnacional, la afluencia de retornados de Sudán, las crisis climáticas y un entorno político frágil, sugieren que las elecciones se llevarían a cabo en un ambiente de elevadas tensiones», alertó.
Ante la cercanía de los comicios, previstos para 2024, el enviado especial del organismos remarcó la necesidad de cumplir condiciones como un nuevo marco constitucional «permanente» y el despliegue de fuerzas unificadas debidamente entrenadas y equipadas.
Haysom insistió en la importancia de un plan operativo de seguridad electoral, un marco electoral claro, así como instituciones y mecanismos electorales junto a las modalidades de registro de votantes y los instrumentos de resolución de disputas electorales acordadas mediante consenso.
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