Tras cuestionar el rol de la oposición en plena Covid-19, la exmandataria señaló que de este terrible momento se saldrá y espera que los que abrazan la vocación política tengan claro que ejercer esto es representar a los intereses.
Tengo la perspectiva de que cuando la pandemia termine los poderosos van a ser más poderosos y los débiles vamos a ser más débiles, los ricos más ricos, los pobres más pobres. Por responsabilidad histórica, por convicción personal y por representación popular tenemos que abordar este debate con todos los argentinos, piensen como piensen y estén donde estén, dijo.
Fernández se mostró confiada en que la sociedad tenga la grandeza y la inteligencia de comenzar a discutir en serio a través de propuestas, de políticas.
Al encabezar un acto en la localidad bonaerense de Lomas de Zamora, donde entregó varias computadoras en el marco del programa Conectar Igualdad, la exmandataria calificó ese plan, nacido bajo su gestión, como una verdadera revolución.
Durante su discurso, la vicepresidenta remarcó que no se puede hoy seguir en una Argentina que cuando un ciudadano enciende el televisor se le torna insoportable estar escuchando condenas y denuncias que redundan en una Argentina de oportunidades perdidas.
‘Hoy estamos en condiciones los argentinos de poder sopesar las políticas que nos dieron resultado, porque más allá de la ubicación política que cada uno tenga, yo creo que en el 2015 éramos más felices’, expresó.
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