Pese a dificultades de diversa naturaleza, el 2023 puso de relieve el buen funcionamiento de la economía nacional, la cual consolida su crecimiento, mientras que en los países vecinos, Países Bajos y Francia, “está casi ausente”, declaró el mandatario.
En la alocución a los ciudadanos con motivo de las festividades navideñas, De Croo admitió que 2023 ha sido un año de “tensiones y conflictos”, en el que la política “ha desconectado” de los ciudadanos.
El mensaje transmitido por las redes sociales ensalzó también la gestión gubernamental en materia de empleo, al acreditar la creación de cerca de 300 mil puestos de trabajo durante el actual mandato del Ejecutivo.
De cara a 2024, el dignatario subrayó el propósito de “seguir haciendo crecer la economía, ayudar a más belgas a encontrar trabajo y reforzar la clase media”, mientras llamó a la cooperación con vistas a las elecciones federales, previstas para el mes de junio, pues “un país dividido, alegó, no será fuerte jamás”.
En 1 de enero, Bélgica asumirá la presidencia rotatoria del Consejo de la Unión Europea, por lo que De Croo ratificó también la voluntad de impulsar la política industrial del bloque.
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