Uno de los asesinatos ocurrió la madrugada del martes en el municipio Mao, Valverde, donde fue hallado el cadáver de la joven policía Nolvery Domedy Vanderhorst Delgado, quien recibió varios disparos de su pareja.
De acuerdo con testimonios de residentes en la zona, Delgado y su novio, también miembro de la institución policial, tuvieron una discusión y luego el agresor le disparó con su arma de reglamento, presuntamente por celos.
Vecinos del lugar describieron a Delgado, de 29 años, como una joven “decente y tranquila”, que llevaba cerca de un año viviendo en el sector, mientras que Vladimir Heredia, de 26 años, solo tenía dos meses en la casa.
El rotativo también dijo este miércoles que otra mujer fue encontrada sin vida y con signos de violencia en el interior de una vivienda ubicada en el sector Villa Rosa Rosa, de La Vega.
La víctima fue identificada como Fátima López Rosario, de 53 años, y Arquímedes Santos, señalado como el causante de su muerte, se encuentra detenido en la dirección regional de la Policía Nacional.
República Dominicana es el segundo país de la región con mayor índice de feminicidios, con 2.9 por ciento por cada 100 mil mujeres, solo superado por Honduras, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La eliminación de la violencia contra ese grupo de la población continúa siendo una asignatura pendiente en el país, donde cerca de siete de cada 10 mayores de 15 años afirman que han sufrido agresión física y/o psicológica, de acuerdo con el Fondo de Población de Naciones Unidas (Unfpa).
Mes tras mes la prensa local recoge historias desgarradoras de muertes violentas por razones de género, mientras las cifras ponen en jaque a las autoridades que enfrentan, en el orden social, uno de sus principales retos.
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