Un reporte publicado en el sitio digital informativo Tag24, de la Universidad Niccolo Cusano, de esta capital, señala que el documento, de unas 200 páginas, establece protocolos de respuesta ante diferentes pandemias, así como medidas preventivas e intervenciones no farmacológicas.
También prevé planes detallados para el desarrollo y aplicación de vacunas y el uso de otros medicamentos, incluidos los procesos de autorización de emergencia, a la vez que se presta especial atención a la sostenibilidad y eficacia a largo plazo de las medidas.
Se señala en el mismo que, tras la experiencia del Covid-19, se evidenció la importancia de contar con este plan actualizado y proactivo, el cual tiene como objetivo principal la reducción de los efectos de las pandemias, con acciones oportunas y apropiadas.
Se encuentran además entre sus propósitos reducir el impacto pandémico en los servicios sanitarios y sociales, proteger la salud de los trabajadores sanitarios y establecer una estrategia efectiva para la información y el empoderamiento comunitario, subraya la nota.
En el plan se reconoce el papel crucial de las vacunas y se destaca la importancia de involucrar activamente a la población en las campañas de prevención y contención, a la vez que se enfatiza el papel del comportamiento responsable de cada individuo para enfrentar las pandemias, con acciones como el lavado de manos y el uso de mascarillas.
Se pretende reflejar un compromiso hacia un enfoque más integral y flexible, tomándose en cuenta las experiencias pasadas y los desarrollos globales, con el establecimiento de una base sólida para enfrentar desafíos futuros, al tiempo que se busca proteger la salud pública y la continuidad de los servicios esenciales.
Entre las acciones que se prevén se encuentra el posible cierre de escuelas, la educación a distancia, los toques de queda y los confinamientos, así como la implementación del uso obligatorio de mascarillas y el distanciamiento social, ya aplicadas durante la pandemia de Covid-19, agrega la fuente.
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