En un mensaje a propósito de la fecha, el mandatario mencionó la guerra en Sudán y los golpes de Estado en África Occidental y Central como asuntos que ponen en riesgo las vidas humanas y las estructuras sociales y materiales de los países donde corren esas disputas, además de crear inestabilidad en el continente.
“Los gobiernos, partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil y los ciudadanos africanos en general estamos llamados a contribuir para la armonía, la comprensión y la convivencia entre los pueblos y naciones, teniendo como meta la construcción de una África unida y dedicada al progreso y el desarrollo”, subrayó.
Lourenço remarcó que, como Campeón para la paz y la reconciliación nacional nombrado por la Unión Africana, trabajará siempre en la búsqueda de soluciones que lleven a la conquista y preservación de estos bienes, así como de la democracia y el respeto de los derechos humanos en el continente.
Añadió que la fecha del 31 de enero debe impulsar a la reflexión sobre lo hecho hasta ahora y el camino que resta por recorrer para hacer frente a los grandes retos de la paz, la estabilidad y la reconciliación en África.
Valoró que principalmente los jóvenes deben comprometerse con iniciativas que lleven a la construcción de una cultura de paz, para que predomine la diplomacia en la prevención de conflictos.
En tal sentido mencionó que Angola promueve estos aspectos y organiza cada dos años el Foro Panafricano para la Cultura de Paz y No Violencia, conocido como Bienal de Luanda, en asociación con la Unión Africana y la Unesco.
Recordó que el pasado año se realizó su tercera edición, donde participaron jefes de Estado y de Gobierno, entidades políticas de diferentes niveles y personalidades políticas, sociales y culturales de los países africanos para abordar estas cuestiones.
“No tenemos otras opciones que la paz, la estabilidad y la seguridad para realizar la ingente tarea de crear condiciones humanas y materiales con el objetivo de promover el desarrollo económico y la mejoría de las condiciones de vida de nuestra población”, enfatizó.
En lo personal, el presidente angoleño significó que continuará empeñado en la resolución del conflicto en el este de la República Democrática del Congo y en la contribución a la normalización de relaciones políticas y diplomáticas entre ese país y Ruanda.
Igualmente, reafirmó que está comprometido con la búsqueda de soluciones pacíficas para los diferentes conflictos que perduran en la región, impulsando constantemente el diálogo y promoviendo la consulta política como vía para el refuerzo de la confianza y la construcción del entendimiento entre las partes.
oda/kmg