Según un comunicado de la agencia de Naciones Unidas de un total de 2,9 millones de desplazados internos en el país, 1,6 millones son los más vulnerables y requerirán asistencia humanitaria en 2021.
Este año los socios humanitarios de Somalia planean ayudar a 3,1 millones de ciudadanos más vulnerables, entre ellos a un millón de niños menores de cinco años, a luchar contra el hambre, la desnutrición aguda, otras amenazas para la salud y los brotes de enfermedades, puntualizó la Oficina.
En 2020, las inundaciones perjudicaron a dos millones de ciudadanos y en noviembre el ciclón Gati afectó a 120 mil personas en la región semiautónoma de Puntlandia, en el nordeste del país.
El lunes, el Gobierno del presidente Mohamed Abdulahi Mohamed y la ONU solicitaron la donación de fondos financieros por mil 090 millones de dólares para ayudar a los nacionales que requerirán auxilio en los próximos meses.
Asimismo, este país y la OCHA lanzaron el Plan de Respuesta Humanitaria 2021 para ayudar a cuatro millones de personas de los 5,9 millones que necesitan apoyo, incluidos los desplazados internos y las comunidades de acogida.
La situación humanitaria en Somalia empeoró el año pasado por la incidencia de las inundaciones, la Covid-19 y la plaga de las langostas del desierto.
Naciones Unidas prevé que este año el país podrá enfrentar desafíos más drásticos, ya que se pronostican condiciones de sequía -y probales niveles de lluvias por debajo de los promedios asociadas con el fenómeno meteorológico de La Niña-, así como el impacto de la pandemia en la economía.
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