Autoridades del vecino país comenzaron a recibir por Tijuana a grupos de 25 personas inscritos en el Protocolo de Protección a Migrantes (MPP), impuesto entonces por el expresidente Donald Trump bajo la obligación de quedarse en México.
La mayoría de ellos -calculados conservadoramente en más de seis mil- llevan en esa espera año y medio viviendo en precarias condiciones, algunos con sus niños retenidos en Estados Unidos.
Reportes de prensa llegados desde Washington indican que el gobierno expresó interés en financiar vuelos para trasladar a los solicitantes de asilo bloqueados por el expresidente Trump, según Dana Graber, jefa en México de la Organización Internacional para las Migraciones de la Organización de las Naciones Unidas.
Esa nación y la ONU están evaluando la ubicación de los migrantes y los costos asociados a los vuelos, y aún no se han tomado decisiones, aseguró la funcionaria.
Autoridades del El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados confirmaron a La Jornada Baja California el ingreso al vecino país de los primeros 25 migrantes que ya disponían de una cita para continuar con su trámite de solicitud de asilo.
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