Omar Flores, presidente de la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal), valoró el aumento, pero de cara al futuro, pues la cosecha actual ya fue vendida, a precios menos favorables.
Una ola de frío que afectó las plantaciones de Brasil propició el aumento de los precios en el mercado mundial, lo cual favorecería a El Salvador, aunque sin resolver de por sí sus problemas de fondo.
‘Si hay más daños (en Brasil) el precio se irá más arriba, pero no se crea que con estos precios se solventa la situación de crisis del sector, si acaso viene a paliar’, comentó Flores.
El valor del quintal del café, para su entrega en septiembre, se mantiene por encima de los 200 dólares en la bolsa de Nueva York, un precio sin precedentes desde 2014.
El gobierno de El Salvador ya aprobó un fideicomiso para apoyar a los productores locales, afectados por una vieja plaga de roya, la especulación de los intermediarios e incluso la inseguridad en los cafetales.
Por lo pronto, en el primer semestre de 2021 las exportaciones de café salvadoreño alcanzaron los 90 millones de dólares, mientras los productores redoblan su esfuerzo para abonar las plantaciones y aprovechar la lluvia.
‘Hay que tener mucho tacto en el sentido de fijar precios y sean acorde a las condiciones de mercado’, enfatizó el líder de Acafesal.
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