Según esa empresa, el Mapa Criminal 2019-2020, elaborado consolida información desde 2008 obtenida de fuentes oficiales, investigaciones y estudios académicos, notas periodísticas verificadas y un continuo monitoreo de redes sociales para desmenuzar las actividades del crimen organizado.
Incluye las principales operaciones de narcotráfico, narcomenudeo, extorsión, cobro de derecho de piso, delitos de alto impacto (robo a transportistas, ferrocarril o trata de personas) y robo de hidrocarburos.
Hasta diciembre de 2019 el liderazgo en cuanto a organizaciones criminales lo tendrían cárteles de Sinaloa, con 37 células en 28 entidades; y el Jalisco Nueva Generación, con 36 células en todo el país, con excepción de Sinaloa -y una escisión, el cártel Nueva Plaza-, organizaciones con presencia en Asia, América Latina, Estados Unidos y Europa.
Si bien Los Zetas, el cártel del Golfo, la Organización criminal de Los Beltrán Leyva y Los Caballeros Templarios-La Familia Michoacana ya no son consideradas como organizaciones cohesionadas, Lantia Intelligence identificó a por lo menos 48 grupos provenientes de éstas.
Enfatiza que si bien no hay estado que no tenga organizaciones delictivas, la presencia criminal por sí misma no es motivo de violencia o de una ausencia de Estado o criminalidad.
Sin embargo, la consultora recomendó focalizar recursos materiales y humanos contra aquellos que son más nocivos para los ciudadanos.
Para contener la fuerza criminal, el Gobierno federal desplegó hasta el pasado 20 de julio a 99 mil 946 elementos de la Guardia Nacional en 222 coordinaciones regionales, con principal atención en la Ciudad de México, Estado de México, Jalisco, Guanajuato, Michoacán y Oaxaca.
Además movilizó a 75 mil 888 miembros del Ejército para ‘Operaciones para la Construcción de la Paz’ con refuerzo en siete estados; seis mil 854 destinados a la seguridad en instalaciones estratégicas y tres mil 887 para la erradicación de plantíos ilícitos, ademáqs de siete mil de la Marina. mgt/lma
