Empero, la magia de una conversación fluida tiene mucho que ver con el verbo del entrevistado, y en este sentido Gustavo Egusquiza desborda en dominio y conocimientos del tema.
Español del País Vasco, muy joven, Egusquiza es a priori una de las voces más autorizadas para hablar de la industria sin chimeneas en España.
Autor del libro ‘España Exclusiva: Un Recorrido Mágico Por Hoteles de Ensueño’, donde repasa una serie de establecimientos que sobresalen por su excelencia, accede al diálogo exclusivo con Prensa Latina.
Se trata de un especialista en turismo de lujo y lifestyle, reconocido por la revista Forbes Latam. Egresado de la Universidad de Edimburgo y de la Universidad de Oxford, colaborador de medios de prensa como Vanity Fair, Mas Viajes, El Correo y Bleu and Blanc, tiene un rosario de anécdotas.
Como aperitivo del intercambio con Escáner de Prensa Latina, tomamos algunas.
-En el Hotel María Cristina por ejemplo coincidí en una cena con John Travolta y Benicio del Toro. Me acuerdo que la actriz Aida Folch se acercó a tomarse unas fotos con él y poco después una señora empezó a dar gritos en medio del hotel al ver a John Travolta, tuvieron que intervenir los de seguridad y llevarse a la señora.
-En otra ocasión estaba alojado en uno de los hoteles más lujosos de Portugal, era un palacio renovado que pertenecía a un matrimonio excepcional, amante de las artes. La cantante Madonna llamó para alquilar todo el lugar durante un mes y la dueña le dijo que tenía clientes que llevaban años viniendo y que no podía echarlos.
-Ella insistió y finalmente le dijo que no y que probara en el Ritz que seguramente era un lugar más adecuado para ella.
-LAS PREGUNTAS
Pasada revista a algunos de los numerosos episodios del ámbito hotelero y de viajes por el universo, nos adentramos en las preguntas a Egusquiza.
Prensa Latina: Hasta probablemente 2019 el turismo se veía como la tabla de salvación de la economía en muchos lugares del mundo. De pronto llegó el nuevo coronavirus. ¿La amarga experiencia ha sido suficiente como para que la industria sin chimeneas esté mejor preparada hacia el futuro?
Gustavo Egusquiza: Lo cierto es que los efectos de esta pandemia en el sector turístico mundial han sido devastadores. Solo en Europa 26 millones de empleos dependen directamente de este sector y en países como España representan el 12 por ciento del PIB. Esta es una crisis que nadie podía preverla, los países occidentales no le prestaron la atención suficiente y cuando el coronavirus hizo su aparición los encontró desprevenidos y sin estar preparados.
-En los próximos años la industria del turismo se enfrentará a cambios profundos como la irrupción de la inteligencia artificial y la digitalización. Este es el momento idóneo para repensar las estrategias de la industria turística y prepararse para los cambios que vienen.
-El turista cada vez está más concienciado con la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente así que a las empresas turísticas no les quedará otro remedio que adaptar sus estrategias a estos nuevos cambios y demandas.
En una palabra, reinventarse o morir.
PL: Me consta que ha habido lugares, por ejemplo, en México, donde hoteles y restaurantes han desafiado el coronavirus sin importar los contagios. ¿Cuánto daño le han podido hacer al turismo actitudes como estas o más bien son estrategias válidas para salvar al sector?
GE: En México la industria turística es responsable de casi el ocho por ciento del Producto Interior Bruto y genera 10 millones de empleos directos e indirectos.
-En 2020 el turismo sufrió un desplome del 46 por ciento y una pérdida de 13.000 millones de dólares. Destinos como el Caribe mexicano dependen en un 80 por ciento del turismo extranjero. Con un salario medio de 5.400 dólares al año, ayudas casi inexistentes por parte del Gobierno y una economía donde gran parte de la población no tiene ahorros y vive al día, se han tomado las decisiones que se podían tomar.
-En mi opinión la solución hubiera sido cerrar hasta que un 70 por ciento de la población estuviera vacunada y haber proporcionado ayudas al sector turístico, pero también hay que entender las particularidades de cada país y su músculo financiero. Una cosa es lo que queremos hacer y otra muy distinta lo que las circunstancias nos permiten hacer.
PL: Al hablar de futuro del turismo en el mundo hay muchas medidas replanteadas. Se vuelven a mencionar «nuevos productos», ¿pero en realidad lo nuevo sería en todo caso rescatar la industria de la mejor manera?
GE: Se deben crear nuevas estrategias para satisfacer las nuevas demandas que aparecerán en el mercado y ayuden a transformar el sector. Al mismo tiempo sí, es necesario un rescate, pero solo de aquellas empresas que tengan viabilidad económica a largo plazo, estén alineadas dentro de las políticas de reactivación económica y que ayuden a colocar al sector turístico a la vanguardia de asuntos como el medio ambiente y el I+D.
PL: En tu opinión, ¿Cuánto tiempo durará el trauma de inclinar a los viajeros a decantarse por el turismo doméstico en detrimento del turismo en el extranjero?
GE: Dependerá de los ritmos de vacunación en cada país y la aparición de nuevas variantes, así como de las medidas de cada gobierno que difieren en el mundo y no son homogéneas. Puede que lleve años recuperarse completamente y tener bajo control esta pandemia. La nueva normalidad implica una recuperación más lenta para el turismo internacional hasta que la gente se sienta segura de que los gobiernos no cancelarán los viajes que reservan de manera inesperada.
-Si algo debemos tener claro es que la Covid-19 viene para quedarse y que deberemos estar preparados para nuevas enfermedades que puedan aparecer en los próximos años, aunque las ganas de viajar al extranjero siguen intactas.
-No me atrevo a dar unas fechas exactas, pero puede que entre 2022 y 2023 la mayoría de la población mundial esté vacunada contra la Covid-19 lo que puede coincidir con una recuperación del turismo internacional y de los viajes al extranjero.
PL: El turismo de lujo, que es tu especialidad, pudiera ser el gran ganador de esta crisis coyuntural. Lo digo a partir del hecho de que ofrece más seguridad y calidad en general de los servicios. ¿Es así?
GE: El perfil del viajero ha cambiado mucho en los últimos años. Los destinos de grandes urbes con alojamientos sofisticados ya no seducen tanto a los turistas de este perfil. Ahora entran en juego lugares remotos que ofrecen experiencias únicas.
-Se privilegia la privacidad y las playas, la naturaleza y los viajes en familia lideran la intención de turismo en este segmento. En cierta manera la Covid-19 ha reforzado la tendencia donde prima la seguridad y el aislamiento.
PL: Está el tema de la vacunación, pero igualmente está el tema de muchos ciudadanos en el mundo que no quieren vacunarse. El carnet de vacunación de la Unión Europea es mal visto por ese grupo reticente a la vacunación. ¿Qué es lo más conveniente para que este problema no afecte al turismo?
GE: Este es un tema científico y ético. En este momento la sociedad se pregunta si deben las personas vacunadas tener menos restricciones que aquellas que no lo han sido todavía o si es esta la vía para volver abrir la economía y el turismo.
-Lo cierto es que estas vacunas son parches ya que no paran la transmisión de la enfermedad. Un vacunado puede ser infectado y trasmitir la Covid-19 pero al mismo tiempo las vacunas han demostrado su efectividad en la reducción de su transmisión.
-En mi opinión creo que el carnet de vacunación puede ser un instrumento útil que facilite la libre circulación de las personas de nuevo e impulse el sector turístico.
PL: Ahora fue el Covid-19, pero lamentablemente el temor hacia el futuro con nuevas pandemias es un trauma que perdurará. ¿Cómo debe proyectarse el sector del turismo ante esa realidad?
GE: Debe estar preparado. Lo cierto es que la alteración de la biodiversidad, la globalización y la alta movilidad han provocado que las enfermedades se expandan mucho más rápidamente por todos los países que antaño.
-Que aparezca una nueva enfermedad es una cuestión de tiempo y deben ser los gobiernos los que implementen estrategias de detección, cooperación internacional y prevención en la lucha de nuevas enfermedades de una manera más efectiva.
-Si una enfermedad como la Covid-19, con una tasa media de mortalidad de entre el dos y el cuatro por ciento ha logrado paralizar el mundo, la aparición de una enfermedad con una tasa de mortalidad mucho mayor puede poner en jaque las cadenas productivas del mundo en una economía donde los países son económicamente interdependientes.
-Estamos hablando de un colapso no solamente financiero sino de nuestro modo de vida.
PL: España y Francia, los dos líderes mundiales del turismo actualmente, pero duramente golpeados por el Covid-19. ¿cuánto tiempo demorarán en recuperar el terreno perdido?
GE: Dependerá de la rapidez en la vacunación y de las nuevas variantes que aparezcan en los próximos meses, pero al igual que en otros países que dependen del turismo internacional entre un año y dos, si todo va bien. En el caso de España la gestión de la crisis por parte del gobierno español ha sido completamente nefasta.
-No se han implementado medidas de control serias para poder haber reducido la expansión de la enfermedad y el sector turístico no ha recibido las ayudas necesarias.
-Dicho esto, en el sector turístico existe mucha temporalidad, alta rotación y economía sumergida.
-No solo es el gobierno el que debe hacer una reflexión, sino el sector turístico también. Si quieres recibir ayudas también tienes que pagar y contribuir a la economía.
PL: Los destinos latinoamericanos, muy apetecidos hasta 2019, como México, República Dominicana, Cuba, Costa Rica y el Caribe en general. ¿Cuánto tiempo tomará a los europeos recuperar la confianza de viajar a esa región de forma masiva como antes?
GE: Un poco más de tiempo debido a la complejidad de los programas de vacunación y a su lentitud en estos países. A fecha de hoy solo una media de 1 de cada seis habitantes del continente dispone de la pauta completa de vacunación.
-Los países latinoamericanos deberán hacer un esfuerzo por aumentar la rapidez de vacunación de la población lo antes posible si quieren recuperar la confianza de viajar a esta región e implementar más medidas preventivas, además de campañas de imagen en el exterior.
PL: Y para cerrar, la aviación, componente indispensable para el turismo. ¿Tendrá que existir a futuro casi una simbiosis perfecta entre la calidad de los servicios de las aerolíneas, la hostelería y la restauración?
GE: Se habla de la crisis del turismo, pero no tanto de la crisis de las aerolíneas. Durante más de año y medio todas las aerolíneas mundiales han experimentado una caída drástica en el tráfico de pasajeros, cancelando rutas y vuelos en muchos países. Aerolíneas como LATAM Airlines o Avianca Holdings se declararon en bancarrota.
-Al mismo tiempo, gobiernos como el de España establecieron un nuevo impuesto que gravará a las aerolíneas que operen vuelos domésticos dentro del país.
-Mi pronóstico es que los vuelos cortos se encarezcan en los próximos años y que viajar al extranjero sea algo más caro durante los próximos años. De ahí que sea necesaria una implementar una nueva estrategia que permita definir cuál es el turismo que queremos recibir y como vamos a reorientar nuestro modelo de negocio.
acl/ft
Este trabajo contó con la colaboración de PLTV, jefe de Redacción de Economía Alberto Corona y la webmaster Wendy Ugarte.
