Recientemente, el titular adjunto de Naciones Unidas para asuntos humanitarios, Martin Griffiths, asignó ocho millones del Fondo Central de Respuesta a Emergencias de la ONU para apoyar la asistencia en esa nación caribeña, anunció el vocero.
Tal suma se empleará para proporcionar elementos esenciales como atención médica, agua potable, refugio y saneamiento a las personas afectadas por el desastre, añadió.
Los colegas humanitarios indican que el acceso al sur de la península, donde ocurrió el terremoto, es un desafío porque las pandillas controlan los movimientos, puntualizó Dujarric.
Un convoy de la ONU ya viajó a la zona afectada y un helicóptero del Servicio Aéreo Humanitario de Naciones Unidas administrado por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) transporta suministros médicos y otras necesidades esenciales, detalló el portavoz.
El PMA advirtió que necesitan 1,4 millones de dólares para que este servicio fundamental se mantenga operativo hasta finales de 2021.
La directora ejecutiva del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Henrietta Fore, indicó que los centros de salud, escuelas y otras instalaciones e infraestructura esenciales de las cuales dependen los niños y sus familias fueron seriamente dañadas.
Poco más de una década después de otro gran terremoto, Haití se tambalea una vez más y ahora el desastre coincide con la inestabilidad política, el aumento de la violencia, tasas alarmantes de desnutrición entre los niños y la pandemia de Covid-19, recalcó.
Unicef ya envía suministros de emergencia sanitaria para los hospitales y también busca estrategias para llegar a los niños y las familias vulnerables, manifestó Fore.
En tanto, la Organización Internacional para las Migraciones proporciona asistencia para salvar vidas que incluye mantas, kits de higiene, agua, materiales de reparación y lonas.
También se enfocan en encontrar edificios seguros donde miles de residentes desplazados puedan refugiarse de la tormenta tropical que se aproxima.
Este fin de semana, el secretario general de la ONU, António Guterres, emitió una declaración en la que expresó su pésame al pueblo y al Gobierno de Haití por los cientos de víctimas mortales del terremoto, entre quienes se encuentra un miembro del personal del organismo multilateral.
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