En un comunicado, la cancillería también expresa su inquietud por la creciente inestabilidad en Asia Central y su posible impacto en otras regiones.
La nota indica que Brasil espera el rápido compromiso de las Naciones Unidas para establecer canales de diálogo y que el Consejo de Seguridad pueda actuar para garantizar la paz en la zona.
Considera lo anterior esencial para garantizar el pleno funcionamiento de la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán.
Llama a los ‘actores involucrados a proteger a los civiles, respetar el Derecho Internacional Humanitario, garantizar el acceso sin restricciones de la ayuda humanitaria y respetar los derechos fundamentales del pueblo afgano, en especial mujeres y niñas’.
Precisa que, pese al desarrollo del conflicto, resulta necesario que se preserven los avances alcanzados en las últimas décadas en materia de protección de los derechos humanos, fortalecimiento de la democracia y desarrollo socioeconómico.
El texto concluye que no hay constancia de brasileños que residan o transiten por Afganistán.
Los talibanes declararon la víspera el fin de la guerra en ese país después de que sus combatientes entraron en la capital, Kabul.
Mohammad Naeem, portavoz de la oficina política de los talibanes, comentó a la cadena Al Jazeera que el grupo armado decidiría pronto el tipo y la forma del nuevo gobierno en la nación, además que se brindará seguridad a los ciudadanos y las misiones diplomáticas.
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