Con una votación de 78-20, Thomas-Greenfield –de 68 años– recibió el visto bueno de la Cámara alta, en tanto la votación de Vilsack –de 70 años– resultó en 92 papeletas a favor y siete en contra.
Thomas-Greenfield, una veterana diplomática afroamericana, en su audiencia de confirmación habló de la necesidad de recuperar el compromiso con el multilateralismo y se refirió al ‘papel fundamental’ que debe jugar Estados Unidos en el ámbito internacional.
Desde la administración de Ronald Reagan, ella ocupó diferentes puestos en la diplomacia estadounidense, pero con la llegada al poder de Donald Trump decidió apartarse de este campo y comenzó a trabajar para la consultora Albright Stonebridge Group.
Por su parte, Vilsack volverá a dirigir por segunda vez el Departamento de Agricultura, puesto que ya ocupó durante toda la administración de Barack Obama.
Según reporta la cadena de televisión CNN, ahora tendrá la tarea de ayudar a los agricultores afectados por las guerras comerciales de Trump y la pandemia de Covid-19.
Miles de trabajadores de plantas empacadoras de carne han enfermado desde el inicio de la crisis sanitaria en la nación norteña, mientras que aumentan los desafíos relacionados con inseguridad alimentaria, añade ese medio.
Vilsack señaló que pondrá el foco en temas de inseguridad alimentaria, así como en la lucha contra el cambio climático, para lo cual busca asociarse con el Congreso en los esfuerzos hacia la agricultura de cero emisiones.
Si bien Biden lleva más de un mes en la presidencia, hasta la fecha el Senado confirmó a muy pocos de sus nominados al gabinete, falta el aval de la Cámara alta para más de 10 candidatos y quedan vacantes puestos gubernamentales clave, según medios locales de prensa.
Nominados como la secretaria designada del Interior Deb Halaand podrían enfrentar un camino largo hacia la confirmación, debido a que republicanos se oponen a este nombramiento.
Biden tampoco tiene un secretario de Comercio confirmado o un administrador de pequeñas empresas, justo cuando impulsa un paquete de asistencia económica por 1,9 billones de dólares frente a la Covid-19, el cual entre otros beneficios, proporcionaría ayuda a los negocios afectados por la pandemia.
La revista Forbes señaló en un artículo reciente que las agencias federales continuarán dirigidas principalmente por secretarios en funciones y funcionarios a nivel de gabinete, mientras esperan las confirmaciones de quienes encabezarán esas entidades vitales.
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