En una declaración aprobada al término de una reunión de dos días, los representantes de las 20 naciones con mayor poderío económico del planeta reiteraron la decisión de asegurar sistemas alimentarios sostenibles y resilientes.
Los participantes en el encuentro convocado por Italia en su condición de presidente de turno del Grupo, señalaron que seis años después de la adopción de la Agenda 2030 de la ONU para el Desarrollo Sostenible, una cuarta parte de la población mundial sufre aún la inseguridad alimentaria.
En ese sentido, precisaron que el crecimiento económico sostenible solo será posible con una agricultura viable que genere ingresos estables, empleos decentes y oportunidades para campesinos y trabajadores agrícolas, sus familiares y las comunidades rurales.
Asimismo, subrayaron la necesidad de una mayor atención a la contribución de los trabajadores y comunidades agrícolas como parte de la sostenibilidad social de los sistemas alimentarios.
El desperdicio de alimentos, la aplicación del enfoque integral ‘Una Salud’, la promoción de la investigación y la innovación en el sector agrícola frente al impacto del cambio climático y la pérdida de la biodiversidad fueron otros aspectos abordados por la declaración.
El ministro italiano de Políticas Agrícolas, Alimentarias y Forestales, Stefano Patuanelli, presidió la cita en la cual participó también la vicesecretaria general de la ONU, Amina J. Mohammed, además de invitados de otras organizaciones nacionales e internacionales.
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