Alrededor de las 05:00, hora local, del martes, una detonación y posterior incendio causaron graves afectaciones a la construcción ubicada en el distrito de Annedal y una veintena de personas resultó herida.
Más de un centenar de ciudadanos debieron abandonar sus hogares, en tanto los equipos especializados analizan las causas de lo ocurrido y adelantaron que los daños materiales son mayores que lo previsto.
El portavoz de la Policía, Thomas Fuxborg, descartó que el incidente fuera provocado por una fuga de gas y precisó que se indaga sobre la posibilidad de que algún artefacto fuera colocado en la edificación.
No obstante, aconsejó esperar al desarrollo de las investigaciones. Fuxborg indicó que los apartamentos se encuentran en peores condiciones de lo esperado, con grietas en las paredes y techos.
Por otra parte, señaló que esta jornada continuaron los interrogatorios de los residentes en el local y apuntó que aún no tienen ningún posible sospechoso.
La víspera, el primer ministro Stefan Lofven lamentó lo sucedido y señaló que es muy pronto para determinar lo ocurrido con exactitud.
Sin embargo, aseguró que, si se trata de un hecho criminal, los responsables responderán ante la ley.
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