La medida fue anunciada por la primera ministra Mia Mottley y cuenta con la participación de cientos de funcionarios de salud y voluntarios desplegados por toda la isla durante el anunciado cierre de dos semanas que comienza este miércoles.
El objetivo es llegar a la mayor cantidad posible de hogares del país en busca de portadores del virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad que hasta ahora afectó a mil 545 personas y 14 muertes, con mil 158 casos recuperados en Barbados.
‘Si algo anda mal, dígalo, si algo no está bien, grítelo, porque esa es la única forma que vamos a saber para ponerle a prueba y poder servirle en una etapa temprana’, reclamó la primera ministra en conferencia de prensa.
En previsión de un deterioro de la situación, Mottley informó sobre la localización de más hoteles para el aislamiento de personas con síntomas.
Asimismo, criticó a quienes no usan mascarillas y celebran reuniones y afirmó que ‘la verdadera batalla está en los hogares, las tiendas del pueblo, las comunidades’.
También confirmó que Barbados recibirá un primer lote de 100 mil vacunas procedentes de la India, con prioridad para los trabajadores de la primera línea de enfrentamiento a la Covid-19.
Entre ellos mencionó al personal de las instalaciones médicas, la policía, las fuerzas de seguridad nacional, los servicios esenciales críticos, los ancianos y los más vulnerables, en particular las personas con múltiples comorbilidades.
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