Según el primer ministro António Costa, la decisión de disminuir las restricciones responde a que alrededor del 85 por ciento de los ciudadanos completó el esquema de vacunación, por lo que el país está en condiciones de avanzar en la eliminación de dichas normativas.
En declaraciones a la prensa, Costa recordó que este no es el fin de la pandemia de la Covid-19 y pidió la cooperación de todos los portugueses.
Aprobada el 23 de septiembre por el Consejo de Ministros, la nueva etapa incluye medidas como la apertura de bares y discotecas.
Además, a partir de hoy las personas no deberán presentar un certificado o examen de Covid-19 negativo para poder acudir a restaurantes ni serán establecidos límites de clientes y horarios.
No obstante, para viajar por vía aérea o marítima, asistir a centros de salud y grandes eventos si será necesario demostrar que no se está contagiado con el virus.
Por el momento, se mantiene el uso obligatorio de mascarillas en el transporte público, residencias de ancianos, hospitales, salas de espectáculos y zonas con gran cantidad de público.
El Consejo de Ministros también anunció que la situación de alerta en el territorio nacional estará vigente hasta el 31 de este mes.
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