Los próximos comicios se realizan en Nevada, seguido por Carolina del Sur pero, con la vista puesta en el 3 de marzo, la senadora Elizabeth Warren realizará una asamblea en Arlington, Virginia, un suburbio de Washington.
El senador Bernie Sanders realizará también dos paradas en Carolina del Norte antes de viajar a Texas, mientras Pete Buttigieg, exalcalde de South Bend, Indiana, tendrá actos de recaudación en fondos en San Francisco y Silicon Valley, California.
Los cuatro estados votan en el supermartes, junto con otros de Alabama a Colorado y Maine a Utah, pasando por Massachusetts y Vermont.
Estarán en juego más de mil 300 de los delegados que elegirán al candidato presidencial en la Convención Nacional Demócrata, un tercio del total.
La campaña demócrata está en un punto de inflexión; para Sanders y Buttigieg, que lideran la contienda después de Iowa y Nueva Hampshire, será una oportunidad de demostrar su popularidad nacional y atraer a concentraciones mayores de votantes no blancos.
Para candidatos relegados como Warren, será la señal de que siguen en la contienda.
Para todos, será la oportunidad de demostrar que no cederán estos estados ricos en delegados al multimillonario Michael Bloomberg, exalcalde de Nueva York, que dedica meses a hacer campaña por el supermartes, salteando los cuatro primeros estados.
Estuvo en Tennessee el miércoles y recorre Texas y Carolina del Norte el jueves.
‘En este ciclo no hay pronósticos posibles’, dijo el estratega demócrata tejano Colin Strother, que cree en las posibilidades de Bloomberg en su estado y más allá.
Hasta ahora no hay señales de que los precandidatos soslayan totalmente Nevada o Carolina del Sur; todos irán a Nevada el fin de semana al comenzar la votación anticipada. Habrá asambleas demócratas el 22 de febrero.
Pero algunos transfieren sus recursos al buscar un difícil equilibrio entre prestar atención a los estados iniciales restantes y conservar fondos suficientes para mantenerse en carrera en las contiendas del mes próximo.
Por ejemplo, Warren estará en Carolina del Sur el viernes, pero no tendrá publicidad televisiva en el estado después del fin de semana. Parte de esos fondos irán a Maine.
Bloomberg, que financia su propia campaña, no tiene ese problema; salteó los primeros cuatro estados para librar una brutal ofensiva política a partir de entonces, con publicidad televisiva y la contratación de más de dos mil empleados en 40 estados y territorios, incluso todos los que votan en el supermartes. Además de los ya mencionados, participan en el supermartes los estados de Arkansas, Minnesota, Oklahoma, así como los votantes demócratas que residen en el exterior.
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