El domingo el gobierno nipón aprobó oficialmente la vacuna estadounidense Pfizer, como vía para detener la tercera ola de infecciones, más grave que las anteriores.
De acuerdo con Kono, la campaña comenzará con 40 mil trabajadores del sector de la medicina, y luego se dirigirá a las personas de 65 años o más, las personas con problemas de salud y los trabajadores de las instalaciones de cuidado de ancianos.
La campaña de vacunación se completará en un año, aseguró el especialista.
Sin embargo, existe preocupación por la escasez de jeringas especiales, que podría conducir al desperdicio de millones de dosis.
Japón, que tiene una población de unos 126 millones de personas, firmó el mes pasado un contrato con Pfizer para adquirir 144 millones de dosis de su vacuna, suficiente para inmunizar a 72 millones de personas.
Recientemente también firmó contratos para adquirir varios millones de dosis de la también norteamericana Moderna y la británica AstraZeneca.
El gobierno del primer ministro Yoshihide Suga tiene también otro apremio, y es que ya que está decidido a celebrar los Juegos Olímpicos este verano, después de que se pospusieran durante un año debido a la pandemia de Covid-19.
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