El informe de la Organización No Gubernamental Nativa apunta a los pobladores de ese sector que al ver a sus animales amenazados por pumas y zorros decidieron matarlos con el plaguicida, cuya comercialización está prohibida en el país.
Sin embargo, el daño colateral lamentablemente afectó también a otros animales e incluso se teme que muchos pichones de cóndor pierdan la vida, indica la pesquisa citada por la televisora RTP.
La cartera de Medio Ambiente y Agua comunicó hace dos semanas que se identificó al presunto autor del hecho, por lo cual solicitaba al Ministerio Público compartir sus declaraciones.
Al divulgarse la matanza, el gobierno decretó duelo nacional pues estas aves, que pueden medir hasta 1,22 metros y tienen una enorme envergadura de 3,20 metros, se consideran un símbolo boliviano.
Desde el 2004 la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza calificó al cóndor de especie casi amenazada, una categoría que describe a aquellas con poblaciones reducidas y un número en descenso.
Estos animales enfrentan como mayor amenaza la persecución humana porque las personas piensan que ataca al ganado. En cambio la especie es carroñera y cumple una función importante de limpieza de los ecosistemas.
El cóndor resulta un símbolo patrio de Bolivia y, además, de Chile, Colombia, Ecuador y Perú, ya que habita en la Cordillera de los Andes.
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