Mediante un comunicado, dicho organismo aseguró que el 23 y 24 de este mes oficiales turcos rescataron a 51 inmigrantes, abandonados en un islote en el río Evros.
Los extranjeros, algunos de los cuales procedían de Serbia y Bulgaria, señalaron que efectivos griegos los golpearon, les quitaron sus pertenencias e intentaron enviarlos por la fuerza a Turquía, señala el texto.
Asimismo, indica que el 18 de febrero 13 afganos fueron sacados por la fuerza de un centro de acogida en la isla de Lesbos bajo el pretexto de ser positivos a la Covid-19, tras lo cual fueron devueltos a este país.
Según la cancillería turca, la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas está implicada en esas prácticas ilegales que tienen lugar de manera sistemática.
Más de 80 mil solicitantes de asilo fueron devueltos a nuestro país en los últimos cuatro años. Instamos al Gobierno griego y a la Unión Europea a poner fin a esas acciones y a respetar los derechos y la dignidad humana, apunta el comunicado.
Durante los últimos meses, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) alertó sobre el incremento de las devoluciones forzadas.
El 28 de febrero de 2020, el presidente Recep Tayyip Erdogan anunció el cese de los controles de seguridad en la zona limítrofe con Grecia, luego de que su país actuara durante cuatro años como muro de contención ante la llegada masiva de migrantes a Europa.
La respuesta de Atenas fue el fortalecimiento de los controles de seguridad, el traslado de militares a la frontera y la suspensión de los procedimientos para el otorgamiento de asilo, entre otras medidas.
Numerosas organizaciones humanitarias y el Acnur criticaron las acciones de ambas partes y recordaron que está en juego la vida de miles de personas.
oda/gas