Amplia repercusión tuvo el hecho en la prensa nacional, que califica el resultado de castigo al actual ejecutivo, mientras la Agencia Alemana de Noticas (DPA) consideró el resultado electoral un plebiscito por la gestión ante la Covid-19.
En el estado de Baden-Wurttemberg (suroeste) los Verdes se ratificaron como la primera fuerza política, al lograr más del 30 por ciento de los votos, resultado similar al obtenido por los Socialdemócratas en Renania Palatinado (oeste).
La CDU descendió al mínimo histórico al contabilizar cifras cercanas al 25 por ciento en medio de cuestionamientos por corrupción y sin un liderazgo firme para las próximas elecciones generales.
En tanto el ultraderechista partido Alternativa para Alemania (AfD) sufrió una notable caída de votos en ambos territorios, con menos del 10 por ciento de los sufragios.
El ecologista Winfried Kretschmann y la socialdemócrata Malu Dreyer obtuvieron la victoria en la primera cita electoral de este año en Alemania.
Analistas consideran complicado el panorama de cara a las elecciones generales tanto para la CDU como para la Unión Socialcristiana (CSU), binomio gobernante hoy y cuestionado por temas de corrupción.
El líder de la CDU, Armin Laschet, y el derechista Markus Soder, de la CSU, aspiran a la candidatura para los comicios de septiembre, mientras analistas no descartan una alianza tripartita que incluya a los Verdes.
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