Desde la cuarentena que cumple por sufrir de Covid-19, el candidato del pequeño partido Renacimiento Unido Nacional (RUNA, hombre o persona en quechua), Ciro Gálvez, expuso en un debate sus posiciones, que reivindican el legado inca, en castellano y en quechua.
Muchos creyeron que solo traducía lo dicho en español al idioma autóctono, pero en realidad agregaba duros adjetivos y hasta un insulto considerado por un traductor como el peor de los epítetos, por lo cual se abstuvo de revelar y solo dijo que tenía diversos significados.
Si los moderadores hubieran sabido el significado de las cosas que dijo, lo hubieran interrumpido, como lo hicieron con excesos verbales de otros candidatos que usaron adjetivos mucho más suaves, anotó.
Una traducción de lo que expresó y entendieron solo aproximadamente cinco millones de peruanos, señala que Gálvez llamó a abrir los ojos, mirar al futuro ‘para desaparecer a todos esos sucios corruptos’, pidiendo, además, matar y liquidar a los corruptos, seguramente en sentido figurado.
También planteo castigar a ‘esos sucios ladrones’, en referencia a los políticos tradicionales y dijo que ‘vamos a castigarlos, para que nuestra familia e hijos puedan vivir sin temor’.
La aspirante progresista Verónika Mendoza, la única entre los demás candidatos que habla quechua (y que no integraba el grupo de debate en el que participó Gálvez), se refirió al episodio en ese idioma y en español.
‘Kunanmantapacha sumaqta runasimipi rimanakusun. Es tiempo de que se escuchen todas las voces de nuestra Patria, en todas las lenguas’, manifestó en Twitter.
Las redes de Internet registraron muchos mensajes de extrañeza porque los debates electorales y otros encuentros importantes no son traducidos al quechua, pese a ser idioma oficial, junto al castellano, por decreto del Gobierno nacionalista de Juan Velasco Alvarado (1968-75).
La televisora estatal TV-Perú difunde resúmenes de noticias en quechua y en aymara, otra de las decenas de lenguas originarias reconocidas en el país.
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