Los escépticos alegan que la energía subsidiada poco aporta en una economía dependiente de los combustibles fósiles y carente de inversiones, anota The Daily Star.
El vehículo, de estilo cupé, es la primera incursión libanesa en el mercado de automóviles eléctricos, un sector de rápido crecimiento que promete reducir las emisiones nocivas en el planeta.
Con un costo de 30 mil dólares, el automóvil alcanza una velocidad de 180 kilómetros por hora y se prevé después de su certificación que comience a comercializarse a finales de este año en Líbano y Europa.
Los críticos precisan que el impacto ecológico del Rise se diluirá ante la dependencia de combustibles fósiles y los frecuentes y largos cortes energéticos que no ofrecen buenos augurios.
Sin embargo, el fabricante no se intimida y dice que la energía subsidiada por el estado ofrece una cara atractiva para un vehículo fuera del alcance de la inmensa mayoría de los libaneses.
‘La electricidad del Líbano es una de las más baratas del mundo. Pocas personas podrían soñar con conducir un automóvil eléctrico a estos costos’, dijo a The Daily Star el jefe ejecutivo de la empresa, Jihad Mohammad.
Mientras, el exministro de Energía César Abi Khalil opinó que es muy competitivo, porque lo conducirán a expensas del Estado.
Líbano genera 95 por ciento de su energía mediante la quema de crudo pesado, uno de los peores contaminantes atmosféricos, al tiempo que el sector de las renovables solo es un pequeño porcentaje.
Al respecto, la directora de financiamiento de energía en el Banco Audi, Carol Ayat, subraýó: ‘Un automóvil eléctrico es tan ecológico como la electricidad que lo impulsa’.
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