Asumir que las conversaciones lideradas por la UA son un fracaso no es correcto porque hay algunos resultados tangibles, aseguró el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, en una carta a su homólogo sudanés, Abdalla Hamdok, según una notificación oficial.
Sin embargo, aunque logramos la firma de la Declaración de Principios, el establecimiento del Grupo Nacional Independiente de Investigación Científica y avanzamos en relación con el calendario de llenado de la GERD (siglas en inglés), el proceso está estancado, reconoció Ahmed.
Queremos proponerle al presidente de la UA, mandatario de República Democrática del Congo, Félix Tshisekedi, que convoque a una reunión de la Mesa de la Asamblea de la organización para poner fin al estancamiento, anunció el premier en la misiva.
Si las partes negocian de buena fe, los resultados están a nuestro alcance, manifestó, y aseguró que Etiopía considera la negociación trilateral bajo el auspicio de la UA, ‘la mejor manera de avanzar para alcanzar un resultado beneficioso para todos’.
Desde que comenzó a erigirse sobre el Nilo Azul hace diez años, la presa provocó desencuentros principalmente entre Etiopía y Egipto, y aunque en 2014 iniciaron negociaciones junto con Sudán, continúan sin firmar un acuerdo.
Varios detalles causan disenso, pero el principal es acerca del tiempo de llenado del embalse. Egipto solicita que dure más de 12 años y Etiopía contempla hacerlo en muchos menos.
Egipto, dependiente del Nilo para casi todas sus operaciones de riego y abasto de agua potable, considera el dique una amenaza para su supervivencia. Y Sudán reconoce que reducirá las inundaciones y abaratará el costo de su electricidad, pero tiene temores similares. Etiopía, en tanto, defiende que utilizará un recurso natural propio para sacar de la pobreza a millones de ciudadanos y promover el crecimiento en el denominado Cuerno Africano, sin provocar grandes daños a terceros.
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