El titular hizo esta afirmación durante una ceremonia en la cual la empresa generadora Engie anunció sus planes para avanzar en esos cambios, lo que contempla el cierre o transformación de seis de las centrales más antiguas para 2024, con una capacidad de 800 megawatts (MW).
Jobet explicó que este será un importante paso en el empeño por reducir la contaminación, la emisión de gases de efecto invernadero, lo que conllevará junto a la eliminación del carbón, desarrollar las energías renovables.
Señaló que Chile posee todas las condiciones para dejar de importar combustibles fósiles y exportar energía limpia gracias a su potencial natural, que permitiría –dijo-, instalar 70 veces más capacidad que la existente hoy y contribuir así a descarbonizar el planeta.
El ministro aseguró que esos cambios de la matriz energética mejorarán la calidad de vida de las poblaciones donde están ubicadas las termoeléctricas que funcionan con carbón.
En esa dirección, Engie tiene planificada la construcción de unos mil MW en proyectos eólicos y solares adicionales a otros mil que ya había anunciado en 2019 y de los cuales varios están en construcción. Por su parte, la ministra de Medio Ambiente Carolina Schmidt expresó que el cambio climático sigue presente aún en medio de la pandemia de Covid-19, y combatirlo con urgencia debe formar parte de la recuperación posterior a la crisis sanitaria.
Coincidió en que las iniciativas anunciadas aceleran la descarbonización con una fuerte inversión en energías limpias, lo cual apoya la meta de Chile de ser carbono neutral, dentro de la política de Estado contra el cambio climático, que trasciende al gobierno de turno.
oda/rc