Los votantes, que representan poco más del 60 por ciento del padrón electoral, podrán ejercer su derecho en el referendo constitucional convocado por el Gobierno y previsto para el 27 de junio, con el objetivo de reformar la carta magna vigente.
En conferencia de prensa este miércoles, el funcionario a cargo de Asuntos Electorales y Relaciones con Partidos Políticos, precisó que la ONI continuará su proceso de inscripción.
Sin embargo, aclaró que estas personas serán incluidas en la base de datos para las elecciones generales programadas para septiembre próximo, pero no para la consulta popular.
Pierre reiteró que ya el Estado depositó unos 20 millones de donares para la compra de materiales electorales y los locales.
En materia de seguridad reveló el establecimiento de una célula reforzada por las Fuerzas Armadas para garantizar la paz en los centros, oficinas y locales del Consejo Electoral Provisional.
También sugirió que en las zonas controladas por bandas armadas, que actualmente constituyen grandes barriadas desfavorecidas de la capital, se utilizará la estrategia de 2006, cuando trasladaron los sitios de votación fuera de esas áreas.
Pierre aseguró que el 90 por ciento de la población, incluida la oposición, está pidiendo una nueva Constitución, aunque no se pronunció respecto a las masivas protestas de las últimas semanas contra ese ejercicio consultivo que está expresamente prohibido en la carta magna vigente.
Asimismo, recalcó que el presidente Jovenel Moïse trabaja para encontrar un acuerdo político.
Sin embargo, a pesar de la confianza del Gobierno, recientemente la Oficina de Naciones Integradas en Haití expresó su preocupación por el referendo constitucional, al expresar que el proceso no es lo suficientemente inclusivo, participativo o transparente.
También aliados del Ejecutivo, como el partido Tet Kalé que llevó al mandatario a la silla presidencial, se desmarcaron de la consulta popular y argumentaron la unilateralidad y la falta de consenso de la nueva ley de leyes.
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