Sugimoto obvió que el reinicio del trabajo en los caducos reactores de energía nuclear de la región dependía de almacenar el carburante gastado fuera de la prefectura, destacó este jueves una información del periódico Asahi Shimbun.
En octubre del pasado año, Sugimoto dijo que se tenía que construir fuera de Fukui una instalación de almacenamiento provisional de combustible nuclear utilizado, antes de autorizar las operaciones en las dos plantas nucleares envejecidas.
Una de las principales preocupaciones de los residentes locales era que el combustible gastado se mantendría indefinidamente en los terrenos de las centrales.
Los habitantes de Fukui temen que se repita el problema que presenta la planta eléctrica de Fukushima, dañada hace una década por un terremoto y un tsunami, y que hoy almacena toneladas de material radiactivo, constituyendo un peligro para el entorno y una afectación a la salud de los pobladores.
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