El sondeo de la empresa Ipsos verificó que frente a 11 por ciento conformado por partidarios de mantener el modelo vigente desde hace tres décadas, 86 por ciento se pronunciaron por hacerle cambios moderados (54 por ciento) y 32 por ciento plantearon cambios radicales.
El resultado se registró en medio de una vasta campaña de defensa de esa política y de descalificación, frente a quienes promueven su cambio, posiciones que defienden, respectivamente, Fujimori y Castillo, quienes disputarán la Presidencia el 6 de junio próximo.
La candidata neoliberal defiende el modelo como legado del gobierno de mano dura de su padre (1990-2000), Alberto Fujimori, quien cumple una larga condena de cárcel por crímenes de lesa humanidad y corrupción confesa.
También argumenta, junto a la mayoría de los medios de prensa y economistas y políticos afines, que es una herramienta indispensable para atraer inversiones y generar empleo.
El humilde maestro y agricultor andino, por su parte, se propone impulsar un referendo en el que la ciudadanía decida si procede o no convocar una asamblea constituyente que elabore una nueva que potencie el papel del Estado, disminuido por la carta magna vigente, que consagró el modelo neoliberal.
La idea, según Castillo, es que el país cuente con una nueva Constitución que establezca que los recursos naturales no son propiedad empresarial sino patrimonio del Estado, para que este reciba la mayor parte de las utilidades generadas y disponga sobre el destino del gas, los minerales y otras riquezas.
De esa manera, dice, el país tendrá recursos para incrementar los presupuestos de salud, educación, vivienda e impulsar la industrialización, así como dotar de gas natural domiciliario de bajo costo a las familias, y para respaldar a sectores claves como el agro.
Los cuestionamientos al modelo económico vigente se han reforzado por los devastadores efectos de la pandemia de Covid-19 que ha causado más de 60 mil muertes en Perú y millones de desempleados, según cifras oficiales, y que el país no puede afrontar con éxito porque el sistema de salud fue severamente debilitado por efecto de la política neoliberal.
msm/mrs