Los nueve jueces del alto tribunal, tres de los cuales fueron designados por el expresidente republicano Donald Trump, considerarán a finales de este año dicha legislación que prohíbe la mayoría de las interrupciones de embarazo a partir de la semana 15, después de que dos cortes inferiores la declararan inconstitucional.
La más alta instancia judicial norteamericana reconoció ese derecho de la mujer en una emblemática decisión de 1973 titulada Roe vs. Wade, y precisó luego que ellas pueden abortar mientras el feto aún ‘no sea viable’, lo que corresponde a unas 22 semanas de gestación.
La ley de Mississippi de 2018 prohíbe los abortos después de la semana 15 de embarazo excepto en casos de emergencia médica o anomalías fetales graves, y fue bloqueada en primera instancia y luego en apelación, por lo que sus autores decidieron entonces interponer un recurso ante el máximo tribunal.
La Corte Suprema probablemente discutirá el tema a finales de este año y la decisión final sería a principios de 2022 durante la campaña para las elecciones legislativas de mitad de período, por lo que según expertos, el tema tendrá un impacto político significativo.
‘Los estados pueden regular los procedimientos de aborto antes de la viabilidad siempre que no impongan una carga indebida sobre los derechos de la mujer, pero no pueden prohibirlos’, escribió el juez Patrick Higginbotham de la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito.
Esa decisión la adoptaron al afirmar un fallo de un tribunal inferior que invalidaba la ley propuesta por la legislatura de Mississippi.
Nancy Northup, presidenta y directora ejecutiva del Centro de Derechos Reproductivos, dijo en un comunicado que ‘las campanas de alarma están sonando con fuerza sobre la amenaza a los derechos reproductivos’, al referirse al anuncio de la Corte Suprema.
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