Son siete los aspirantes a la jefatura del Estado iraní, tras un proceso de selección para el cual se postularon 592 personas.
El septeto posee los requisitos para ganar el puesto que son, a saber: ser mayor de 40 años de edad y menor de 75, profesor la religión islámica, tener un grado universitario y experiencia de dirección y carecer de antecedentes penales.
Durante la primera jornada de la campaña electoral, el actual jefe del Poder Judicial, Ebrahim Raisi, uno de los favoritos, enfatizó en el papel del pueblo en las decisiones y abogó por un cambio en el desempeño gubernamental.
Raisi aseguró que la justicia económica prevalecerá en su gobierno.
Otro candidato, Mohsen Mehralizade, prometió crear empleos, reformas en el sistema bancario y luchar contra la devaluación de la moneda nacional, mientras Mohsen Rezai profundizó en el tema de la pobreza y la falta de vivienda.
A su momento, Alireza Zakani, calificó la corrupción como una plaga que necesita erradicación y se refirió a la política de sanciones antiiraníes de Estados Unidos, una herramienta estratégica a la que Washington nunca renuncia.
Los siete candidatos presidenciales de Irán concluirán sus respectivas campañas 24 horas antes de los comicios y en el ínterin se prevén tres debates entre los aspirantes.
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