Según un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores, Haavisto realizó comentarios ‘irresponsables, indignantes y poco diplomáticos’ el martes último, cuando expuso sus impresiones del proceso electoral y la situación en Tigray, entre otros asuntos de la nación.
Sus acusaciones, subraya, son indicios del deseo de socavar al gobierno etíope y tratar de facilitar intervenciones injustificadas mediante desinformación y mentiras escandalosas.
Asimismo, acusa al político finlandés de desconocer las complejidades del contexto nacional y realizar una evaluación ‘defectuosa, con olor a mentalidad colonial’.
Reitera, además, que las autoridades no dialogarán con representantes del Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF, siglas en inglés), ‘organización declarada terrorista por la Cámara de Representantes del Pueblo (Parlamento)’.
Las afirmaciones de que los principales líderes etíopes expresaron su deseo de destruir a Tigray es una especie de alucinación o un lapsus en la memoria de algún tipo, apunta la declaración.
El señor Haavisto ignora los llamamientos del gobierno para que los combatientes del TPLF depongan las armas, dice, y agrega que la operación de aplicación de la ley en esa jurisdicción es una maniobra para neutralizar sus actos violentos.
También denuncia que el informe menosprecia el esfuerzo gubernamental en la preparación de las VI Elecciones Generales, programadas para el lunes próximo.
Es lamentable, aclara, que esas apreciaciones sean consideradas bajo el pretexto de una preocupación humanitaria por Etiopía, cuando lo evidente es ‘su matiz colonial, algo que nuestro pueblo y gobierno nunca aceptarán’.
De ahora en adelante, avisa, ‘al gobierno etíope le resultará difícil aceptar a Haavisto como un intermediario creíble en nuestras relaciones con la UE’.
Resulta absolutamente importante que la UE considere la posibilidad de elegir un interlocutor imparcial, capaz de abstenerse de hacer declaraciones insensibles y enfocado en ayudar de manera constructiva a enfrentar los desafíos prevalecientes en el territorio, señala la comunicación.
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