El líder de la comunidad nativa de Shirarine, de la provincia de Oxapampa, en la parte amazónica de la región centroandina de Pasco, fue asesinado el lunes último, confirmaron en un comunicado conjunto los ministerios del Ambiente, Interior y Justicia y Derechos Humanos.
La declaración expresa condolencias y condena el crimen y consigna el compromiso de no escatimar esfuerzos a fin de esclarecer el hecho para la sanción a los responsables, para que no queden impunes.
Por su parte, la oficina en Perú del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (ONUD) rechazó el crimen de López, quien trabajaba con ese organismo en la protección de la reserva comunal amazónica de El Sira, y pidió que se haga justicia.
Según reportes de la zona, los asesinos serían invasores de la reserva dedicados al narcotráfico o taladores ilegales de árboles.
La víctima, líder de una comunidad de la etnia asháninka, de 34 años, era secretario de la organización ambientalista EcoSira, es decir activista ambiental, uno de los conocidos como ‘Guardianes de la Amazonía’, varios de los cuales fueron asesinados este año.
La nueva muerte no pudo ser evitada por un mecanismo de protección de líderes indígenas en peligro, anunciada el 21 de abril pasado por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Eduardo Vega.
Desde el inicio de la pandemia de Covid-19 en Perú, en marzo de 2020, han sido asesinados por intrusos dedicados a actividades ilegales unos 10 dirigentes nativos ambientalistas.
Según un recuento de la Defensoría del Pueblo, la lista de víctimas consigna a Arbildo Meléndez, Gonzalo Pío, Lorenzo Wampa, Roberto Pachecho, Yenes Ríos, Erasmo García y una mujer, Estela Casanto. entre otros.
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