Nazib Baraket, propietario de un pequeño negocio de ventas, dijo a Prensa Latina que la situación es insostenible, porque en cada venta pierde dinero.
‘Antes un paquete de pan costaba mil 500 libras libanesas, equivalente a un dólar, y ahora el precio escaló a 11 mil que está por debajo de la cotización extraoficial de casi 20 mil’, apuntó.
En cualquier caso, agregó, no se puede vender ese producto al valor del dólar en la calle, aunque al proveedor si hay que pagarlo en divisas, explicó. El Ministerio de Economía anunció este sábado la medida, al alegar aumentos en la producción y devaluación de la moneda nacional.
Por segunda vez durante este mes y séptima en el año, los usuarios enfrentan un costo más alto para un alimento básico en la dieta del país.
La peor crisis económica en Líbano en décadas comienza a tocar fondo por la eliminación de subsidios a bienes esenciales que inició con un levantamiento parcial de la protección a los combustibles.
Una de las decisiones del Ejecutivo interino contempla la entrega de una tarjeta de racionamiento que aún no se materializó, porque necesita un fondo de unos 550 millones de dólares.
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia estimó que 77 por ciento de los libaneses carece de suficiente dinero para comprar alimentos, mientras el Banco Mundial fija en más de 55 por ciento a los que viven por debajo del umbral de la pobreza, calculado en 3,64 dólares diarios.
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