‘Vemos que realmente hay grupos minoritarios en nuestro país a los que les cuesta muchísimo aceptar la voluntad popular’, destacó Prada a medios locales.
Asimismo, criticó las acciones del gobierno de facto de Jeanine Áñez, el cual tuvo todas las características de una gestión neoliberal, con los actos de corrupción y la crisis económica.
‘Durante el gobierno de facto, vemos que una crisis económica se agudiza, no solamente por el tema de la pandemia, sino por las pésimas decisiones vinculadas a la política económica, entonces esas consecuencias las empieza a sentir el pueblo boliviano, las empieza a sentir las familias bolivianas’, enfatizó la ministra.
El actual presidente de la nación andino-amazónica, Luis Arce, ha denunciado en varias ocasiones la deuda millonaria del gobierno de facto.
Cifras oficiales dan cuenta de que durante 11 meses, Áñez heredó a Bolivia una deuda externa e interna estimada en cuatro mil 900 millones de dólares.
En ese periodo el Producto Interno Bruto cayó 11,1 por ciento, el déficit fiscal era de 12,1, mientras 8,7 por ciento era el déficit del Tesoro General de la Nación.
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