Tras ejercer el sufragio en un centro de votación en la aristocrática comuna de Las Condes, el mandatario declaró a la prensa que ‘este es el primer paso para elegir al próximo presidente de Chile’, en los comicios previstos para el 21 de noviembre.
Piñera, que llega a la etapa final de su mandato con uno de los índices más bajos de popularidad entre todos los mandatarios desde 1990, expresó que al próximo gobierno le corresponderá avanzar hacia una sociedad ‘más justa e inclusiva’.
Asimismo deberá trabajar por el crecimiento económico que sea sustentable y enfrentar grandes desafíos como el combate al cambio climático y ‘tener un fuerte compromiso con todos los chilenos’.
Dijo esperar que estas primarias ‘sean muy participativas y que las voces de todos los chilenos sean escuchadas’ y señaló que se ha trabajado para que el proceso sea seguro con todas las medidas de protección de los electores ante la pandemia de Covid-19.
De esta convocatoria saldrán los aspirantes a ocupar el palacio de La Moneda por las coaliciones Chile Vamos, formada por los partidos de derecha, y Apruebo Dignidad, en la que se inscribieron parte de las fuerzas de oposición.
La carta presidencial del oficialismo deberá surgir entre Joaquín Lavín, de
la Unión Demócrata Independiente (UDI); Mario Desbordes, de Renovación Nacional (RN), Antonio Briones, por Evolución Política (Evópoli); y Sebastián Sichel como independiente.
En las primarias de la oposición acuden Gabriel Boric, del Frente Amplio, que aglutina a los partidos Revolución Democrática, Convergencia Social y Comunes; y Daniel Jadue por Chile Digno, que reúne al Partido Comunista y la Federación Regionalista Verde Social.
A estos comicios están convocados a las urnas solo los militantes de los partidos inscritos en las primarias así como el resto de la población sin afiliación alguna.
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