Unos 46 mil uniformados, entre militares y policías, fueron desplegados para velar por el orden durante la fecha, confirmó el titular de esa cartera del Estado Diego Molano, entidad denunciada por activistas sociales por su papel represivo en las multitudinarias manifestaciones recientes en protesta contra el gobierno de Iván Duque.
Según informes de esa institución días atrás las fuerzas del orden público incautaron explosivos y capturaron a dos ciudadanos relacionados con planes de atentados en esta capital a propósito de la fecha.
Mientras en la ciudad de Calí (a unos 460 kilómetros al suroeste de Bogotá) fueron detenidos una decena de integrantes de la llamada Primera Línea del barrio, porque según informes de inteligencia, pretendía vandalizar el puente de Boyacá, símbolo de la batalla entre las tropas independentistas lideradas por Simón Bolívar y las españolas comandadas por José María Berreiro.
Primera Línea… es calificado por las autoridades colombianas como grupo delincuencial, al que responsabilizan de actos vandálicos durante el paro nacional que durante casi dos meses agitó las calles del país suramericano.
Sin embargo otros los ven como héroes que se enfrentaron a las fuerzas del orden durante las jornadas más intensas de la represión, en especial al Escuadrón Móvil Antidisturbios, al que organizaciones defensoras de derechos humanos hacen responsables de decenas de muertes, violaciones y desaparecidos entre los manifestantes.
El 7 de agosto de 1819 los ejércitos independentista y realista se enfrentaron en la zona conocida como el Puente de Boyacá, cruce sobre el río Teatinos, con un desenlace favorable a los primeros, que con la victoria abrió el camino a la independencia del entonces virreinato de Nueva Granada, actuales territorios de Colombia, Venezuela, Ecuador, Panamá y Guyana.
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