En una breve intervención televisada Lungu reconoció los resultados anunciados anoche por la Comisión nacional Electoral, con la victoria para su principal rival, pese a que durante el fin de semana el mandatario denunció que los comicios del pasado día 12 no fueron ni justos ni libres como se demandó en el ámbito internacional.
‘Acataré las disposiciones constitucionales para una transición de poderes pacífica. Por tanto, me gustaría felicitar a mi hermano el presidente electo, su excelencia Hakainde Hichilema, por convertirse en el séptimo gobernante de la República’, amplió en un mensaje antes de subrayar: ‘Todo lo que siempre quise hacer fue servir a mí país lo mejor posible’ y agradeció al pueblo la ‘oportunidad’ de haber sido su presidente de Zambia.
Pocos después, Hichilema realizó su primera comparecencia ante la prensa como jefe de Estado electo y prometió servir a todos los zambianos ‘equitativa y justamente’.
Aunque se anticipaba un resultado electoral muy ajustado, el presidente de la Comisión Electoral, Esau Chulu, anunció anoche finalmente la victoria del candidato de la oposición, con algo más de 2,8 millones de votos, mientras que Lungu quedó segundo, con unos 1,8 millones del apoyo comicial.
Para observadores políticos Hichilema, quien aspiraba por quinta ocasión a la jefatura de Estado, capitalizó el malestar por la crisis económica y social que sufre el país, ahora agravada por la pandemia de la Covid-19.
El economista y hombre de negocios convertido en político, concurrió a las elecciones presidenciales como aspirante del Partido Unido Para el Desarrollo Nacional, e hizo de la recuperación socioeconómica el centro de su campaña ante su principal contrincante.
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