En los últimos cinco días, el jefe de la Casa Blanca pronunció tres discursos sobre los esfuerzos de la retirada y respondió dos veces a las preguntas de los periodistas, algo poco usual desde el inicio de su administración el 20 de enero pasado.
Diariamente el Gobierno envía actualizaciones a los medios de prensa sobre el número de personas trasladadas desde Afganistán.
La cifra más alta en un período de 24 horas se registró el pasado lunes, cuando los vuelos militares trajeron a 12 mil 700 estadounidenses y colaboradores afganos desde Kabul.
El aumento de las comparecencias televisivas del presidente ocurre en medio de fuertes críticas, incluso de algunos demócratas, por la forma en que su administración manejó la retirada del país asiático.
De acuerdo con The Hill, el presidente pasó los primeros días de la retirada en Camp David, residencia de descanso ejecutiva, lo que provocó críticas por su ausencia de Washington en un momento crucial.
‘Definitivamente, están tratando de recuperar el control de la narrativa tras la pesadilla que vive la administración desde mediados de agosto’, dijo al diario estadounidense un estratega demócrata cercano a su Gobierno.
El ejecutivo quiere reconstruir su confianza con el público y recuperar su equilibrio, y puede lograrlo. Sin embargo, debieron hacerlo en el momento de la ofensiva del movimiento Talibán, dijo el experto.
Este martes Biden aseguró que su administración completará la evacuación, al tiempo que reconoció los riesgos para las tropas sobre el terreno. ‘Cuanto antes podamos terminar, mejor’, dijo.
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