‘Necesitamos una solución inmediata, porque no puedo decir que esto es una crisis y pedir a paciencia a los pacientes porque esa enfermedad no tiene paciencia’, declaró.
Al frente del departamento de hematología y oncología, Mardessi es pesimista con el futuro de los enfermos, a los cuales aún el gobierno subsidia sus medicamentos.
Empero, hay señales de que suspenderán esas subvenciones por la imposibilidad del Banco Central (Banque du Liban) de continuarlas.
Algunos tratamientos cuestan unos cinco mil dólares por sesión y los pacientes solo pagan ahora 400, explicó el especialista, pero cómo se ve el país pronto ni esa cifra será asequible para muchos.
De otro lado, está la escasez de medicamentos en el mercado, de la cual el ministro interino de Salud, Hamad Hassan, culpó a comerciantes acaparadores a quienes guía la codicia, apuntó.
La Asociación Barbara Nassar de Apoyo a Pacientes con Cáncer, entregó en 2020 medicinas por valor de 1,5 millones de dólares.
Pero ahora Hani Nassar, cuya esposa Barbara fundó la organización antes de fallecer a causa de la enfermedad, denunció que la errática política del país conspira contra sus esfuerzos para aliviar el sufrimiento de los enfermos.
‘El Banco Central quiere eliminar el subsidio y el Ministerio de Salud no, y mientras tanto el paciente está sentado allí sin tratamiento’, resumió.
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