Esa instancia señaló que el incremento fue de un 15 por ciento en comparación con el año anterior, 2019, lo que significa un alza de superficie cultivada de tres mil 900 hectáreas.
El representante de Unodc en Bolivia, Thierry Rostan, explicó que en 2019 fueron cultivadas 25 mil 500 hectáreas de más, mientras que al término de 2020 fueron 29 mil 400, distribuidas en diferentes puntos del país, entre los que destacan seis áreas protegidas.
A partir del estudio de ONUDOC, recogido en el informe Monitoreo de Cultivos de Coca en Bolivia 2020, las autoridades de la nación suramericana anunciaron que al finalizar el año en curso serán erradicadas nueve mil hectáreas de coca excedentaria.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, informó que de ese plan ya fue cumplido el 59 por ciento, tras la eliminación de cinco mil 301 hectáreas al cierre de agosto.
Del Castillo responsabilizó del aumento de los cultivos excedentes de coca a la administración de Añez, la que, aseguró, nunca tuvo la voluntad de eliminarlos de manera efectiva.
En consecuencia reivindicó el modelo de erradicación concertada y racionalización de coca excedentaria implementado durante los gobiernos del Movimiento al Socialismo presididos por Evo Morales (2006-2019).
El titular de Gobierno recordó que tras el regreso de la democracia al país luego de las elecciones de octubre de 2020, uno de los desafíos del presidente Luis Arce fue el de retomar el referido modelo, y reformar a las fuerzas del orden público destinadas a darle cumplimiento.
Durante la administración golpista, precisó, fueron registradas contrataciones irregulares en las fuerzas Especial de Lucha Contra el Narcotráfico y de Tarea Conjunta, mientras que las labores de erradicación de cultivos ilegales fueron detenidas durante seis meses.
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