La parlamentaria por Wyoming, una crítica de la actuación del exmandatario, advirtió a los republicanos que no obstruyeran la investigación del grupo bipartidista durante su audiencia de apertura el 27 de julio.
‘Todos los miembros de este comité están dedicados a realizar una investigación no partidista, profesional y exhaustiva de todos los hechos relevantes relacionados con el 6 de enero y la amenaza a nuestra Constitución que enfrentamos ese día’, dijo Cheney en un comunicado.
‘He aceptado el cargo de vicepresidente del comité para asegurar que logremos ese objetivo’, puntualizó.
El presidente del panel, Bennie Thompson (demócrata de Mississippi), hizo el nombramiento el cual observadores consideran es una medida diseñada para mitigar las críticas de Trump y sus leales en el Capitolio de que la investigación del panel deviene un ejercicio puramente partidista.
‘La representante Cheney ha demostrado una y otra vez su compromiso con la obtención de respuestas sobre el 6 de enero, asegurando la rendición de cuentas y haciendo lo que sea necesario para proteger la democracia para el pueblo estadounidense’, dijo Thompson en un comunicado.
Cheney es uno de los dos republicanos que la presidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi (demócrata de California), designó para formar parte del comité especial, junto con el representante Adam Kinzinger (republicano de Illinois).
Ambos fueron los únicos republicanos que se sumaron a los demócratas en la votación para crear el panel del 6 de enero.
También estuvieron entre los 10 republicanos que votaron en enero para impugnar a Trump por sus esfuerzos sostenidos para anular las elecciones de 2020 y su papel en la incitación de los disturbios mortales en el Capitolio cuando el Congreso certificó la victoria de Joe Biden.
‘Le debemos al pueblo estadounidense investigar todo lo que condujo y ocurrió el 6 de enero. No nos disuadirán las amenazas ni los intentos de obstrucción y no descansaremos hasta que nuestra tarea esté completa’, dijo Cheney en un comunicado.
Previamente, los republicanos en el Senado descalificaron un proyecto de ley que habría creado una comisión independiente y bipartidista al estilo del 11-S para investigar el asalto al Capitolio.
En venganza a la participación de la parlamentaria en el panel y su posición a favor de investigaciones en su contra, Trump prometió respaldar a un contrincante en las primarias en su carrera por la reelección en Wyoming.
La parlamentaria lideraba la Conferencia Republicana de la Cámara antes de ser expulsada del puesto por su oposición a las mentiras electorales de Trump y afirmaciones de que le robaron las elecciones.
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