La entrada ilegal del cereal genera un daño económico a los productores nacionales porque disminuye los precios en el mercado interno, explicó el presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Fidel Flores.
‘Ello desincentiva la producción y afecta el consumo nacional de este importante alimento, estratégico para el país’, añadió el funcionario, y expresó su preocupación y la del sector ante ese flagelo, de acuerdo con la Agencia Boliviana de Información.
Según Flores, para combatir el contrabando de ese y otros productos agrícolas deben articular acciones el Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando, la Aduana Nacional y el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria.
‘Solicitamos a estas instancias la coordinación necesaria para evitar el ingreso ilegal del maíz, que, incluso, viene camuflado como de producción nacional desde la zona del Chaco, con documentos obtenidos por los contrabandistas’, informó.
El presidente de la Anapo aseguró que también pidió al Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando realizar operativos para enfrentar el problema, ‘que causa un perjuicio económico a los productores’.
Flores explicó que el trasiego de los contrabandistas por el punto fronterizo con Argentina de Yacuiba, en el sureño departamento de Tarija, constituye una competencia desleal para todos los productores bolivianos.
Ello se debe a que el cereal del vecino país es producido mediante Organismos Genéticamente Modificados, que tienen una mayor productividad y competitividad en el mercado, precisó.
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