Si se destruyen los acuerdos del Viernes Santo, es muy poco probable que haya un tratado bilateral entre Reino Unido y Estados Unidos, afirmó la congresista demócrata en un evento organizado por el Real Instituto de Asuntos Internacionales conocido popularmente como Chatham House.
Estados Unidos, y el presidente norteamericano Joe Biden han expresado preocupación por el futuro del pacto que en 1998 puso fin a más de 30 años de violencia armada en Irlanda del Norte, luego de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) el año pasado.
Como parte de los acuerdos del Brexit, y para evitar el establecimiento de una frontera física con la República de Irlanda, la provincia británica permanece dentro del mercado único y la unión aduanera europeos.
El gobierno británico se muestra reacio, sin embargo, a implementar los controles sanitarios y aduaneros para las mercancías procedentes de Gran Bretaña, a pesar de las exigencias y amenazas de la UE.
Según Londres, las empresas británicas necesitan más tiempo para ajustarse a las nuevas regulaciones, mientras que los unionistas norirlandeses, que meses atrás protagonizaron disturbios, amenazaron con hacer caer el gobierno de coalición que sustenta la paz en la otrora convulsa región.
A respecto, Pelosi recalcó que el Congreso estadounidense tiene en muy alta estima los acuerdos de paz y que para Washington la prioridad es que las negociaciones que mantienen el Reino Unido y la UE garanticen que no haya frontera entre ambas Irlandas.
Tienen que llegar a un acuerdo, tiene que haber un acuerdo, sentenció.
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