Esta conferencia cree que en contradicción a lo dicho por el primer ministro conservador Boris Johnson de que (el pacto) promoverá la paz en la región del Indo-Pacífico, se trata de un acto peligroso que socavará la paz mundial, aseguró la moción aprobada por 70 votos a favor y 30 en contra.
El 15 de septiembre pasado, Johnson, el primer ministro australiano Scott Morrison y el presidente estadounidense Joe Biden anunciaron la conformación de una alianza trilateral en la región del Asia-Pacífico.
El pacto conocido como Aukus incluye la adquisición por parte de Australia de una flota de submarinos nucleares fabricados con tecnología norteamericana y mano de obra británica. También contempla también el desarrollo para uso militar de la inteligencia artificial y las tecnologías cuántica y cibernética.
La nueva alianza no solo provocó una airada reacción de China, que la consideró una amenaza a la paz y la estabilidad regional y un pretexto para intensificar la carrera armamentista, sino que contrarió también a los franceses por la pérdida de un contrato ya firmado con los australianos para el suministro de submarinos convencionales.
La moción de condena al Aukus fue aprobada por la conferencia partidista que se celebra en la ciudad costera de Brighton a pesar de que el líder de la organización opositora, Keir Starmer, secundó días atrás en el Parlamento la alianza militar sellada por Johnson.
La reunión anual constituye una prueba de fuego para Starmer, quien también debió dar marcha atrás a su propuesta de eliminar el sistema que otorga un voto a cada militante para elegir a los líderes laboristas, y reemplazarlo por un colegio electoral.
Este lunes también se conoció la renuncia del legislador Andy McDonald a su puesto en el llamado gobierno en la sombra (opositor), tras acusar a Starmer de dividir al laborismo y no cumplir las promesas hechas a la membresía.
El líder laborista será el encargado de cerrar mañana la conferencia anual después de cuatro días de debates en Brighton.
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