Señaló como interpelante que fue una compra muy costosa para aparatos de la década de 1970 y con gastos operativos muy elevados de dos mil 600 dólares por hora de vuelo de combustible.
‘El Ministerio de Defensa realiza este gasto millonario, mientras recorta los recursos al personal militar y, fundamentalmente, al personal subalterno, el más pobre, al que, según decían, iban a privilegiar’, añadió.
Asimismo, cuestionó la congelación de inversiones fundamentales para el país en mantenimiento de los radares, y ‘Uruguay sigue sin tener cobertura en los tres principales aeropuertos, por lo cual se genera una problemática para el control del tránsito aéreo’, afirmó.
Núñez formuló en el plenario de la Cámara de Representantes 17 preguntas sobre características técnicas de los aparatos, las condiciones de compras a España, desoídas advertencias jurídicas previas, faltas de garantías y otros detalles por esclarecer.
Del otro lado el interpelado García calificó la compra de ‘excelente, oportuna y a precios absolutamente incomparables’, y que ‘fue envidiada por otros países’.
Sin embargo, puso el énfasis en dar una interpretación ‘ideológica’ a la interpelación por pertenecer Núñez al Partido Comunista, del que atacó un reclamo de hace cuatro años en favor de la democratización de ‘una fuerza armada, que pretende pasar por encima del pueblo’.
msm/hr